La faisanería era originalmente un parque de caza barroco, pero en el siglo XIX comenzó una remodelación que aún hoy caracteriza el aspecto del recinto. El ministro de Estado ducal August Ludwig Sayn-Wittgenstein-Berleburg utilizó la faisanería como residencia de verano e hizo remodelar el parque al estilo inglés. Desde entonces, senderos sinuosos, suaves bordes boscosos, estanques y ejes visuales invitan al visitante a vivir la naturaleza de forma consciente.

La idea de un gran jardín paisajista fue sugerida por el consejero médico Wilhelm Zais en 1844 para integrar armoniosamente la faisanería en el paisaje balneario y recreativo de Wiesbaden. Hoy en día, este valor histórico-cultural se refleja en el hecho de que está protegido por la Ley de Protección de Monumentos de Hesse. El paisaje sigue siendo reconocible, sobre todo en la zona de entrada, alrededor del estanque y en el parque infantil. Con senderos de trazado suave que ralentizan el ritmo de los paseos, la faisanería se convierte en un lugar donde percibir conscientemente la naturaleza.